La voz ya no pasaba por la ruta del sonido. Códigos en resonancia eran obstruidos en su corteza por la salida del espíritu. De inmediato, una base nucleótica se encendió de lucidez con el enlace de un aminoácido.
Tres rostros en la membrana divina se ordenan en la simiente. Los sesenta y cuatro códigos del ADN_ARN se integran por la cara inferior de una nave en interfase orgánica.
Los sueños se alinean y ondulan como serpientes. En las fronteras de su vacío, las pulsaciones de la muerte agitan esa "otra realidad".
Mordía senos de pan y su erotismo se agitaba como una tea. En la conciencia, una flor cortaba carne con el alma.
Lesamieron se mete entonces en los gestos de un andar ácido que busca crujidos en la posición vertical de la piel.
Una célula lipida coligada, desliza imágenes filiformes en la hemoglobina cristalizada de las sienes de una célula en vibración desoxigenada. Sin atravesar, algúién llama y entra.
La descorporización del aliento vacila al borde de una lágrima.
Adenina y Guanina, operan mentalmente a sus proteínas. El Uracilo da vueltas en el vientre de una biosíntesis.
Gotea la tela ahuecada en un pezón que arde.
Ella pone sus manos sobre un huevo cubierto de irrealidad.
- Tómame ahora, ceñida y húmeda...
Pero el útero se percibe como una plaza pública dentro de un casillero empapado con pintura del corazón.
En un pañuelo hay un espacio ideal donde poder abrir el ensayo exterior de mi yo.