jueves, 14 de marzo de 2013

LA ESTRELLA QUE PERFORABA LO QUE MIRABA METIDA EN UNA GARGANTA QUE LA SECABA EN UN MAR DE SANGRE.

Vi la luz descender de los cielos y regresar al Universo Mayor.
Un nanosegundo en el rostro de una duda se refrescaba entre el suelo y el pavimento. Mientras, una nave-legión penetraba al sol en los ojos del sonido.
Y la ausencia se extendía...como lloviendo.

En una pantalla esférica atardecen las orillas de mar que el tiempo arruga.
Entonces Lesamieron descubre un caracol con necesidad de luna.

- La restauración transhumana incorpora hoy la inmortalidad del aura como una vía de transición posible a un antimundo matemático.

La amapola se llena de olas.

La leche se endurece en los corazones de una madre mientras una joven se transfigura en el vinagre de una tarde de invierno.

Los latidos se estrían de frio sobre un poema viejo.

Un microcomponente para los campos de existencia atraviesa el tubo de llanto de su estructura protónica interna. Después, la tristeza se llena de aguas rojas.

Dejó de vivir a causa de ella buscando flores marchitas en las apariencias externas. Ella ponía su sensibilidad en un graznido prolongado que soplaba en el olvido.
Ambos murieron en el nudo formado por la sirena de un barco roto.

Una partícula hecha pensamiento se posó encima de un vestido de seda. Los detalles de su persona se oscurecían achatados sobre una sirena que llevaba espuma en la sangre.
Un pueblo físico-espiritual se interna en un electrón.

Sólo tiempo fracturado en ese recuerdo que circula metido en un grito.