jueves, 6 de junio de 2013

EL INCONSCIENTE QUE VACIABA SU ESPERA DE FRESA EN UNA PALABRA DE ORO QUE SE HUNDÍA COMO UN HILO EN EL OLVIDO DE UNA CIFRA QUE BRILLABA DE FRÍO

La vida, que sólo es un sabor, duplica toda creación mental en su contraparte espiritual de leche traspasada hacia la supervivencia material, el pensamiento es un río de aire que respira  en la resurrección de la hierba, el sonido de la soledad se levanta para gritar y cantar, la realidades se duplican en el "YO" de la conciencia que exhibe el alma desde su futuro espiritual, Lesamieron transfiere censores de supervivencia hacia los ajustadores de luz de las estancias cósmicas, un clavo sangra sobre la tinta de una canción que usa el látigo para azotar su vacío blanco, una mujer mete su dormir en el viento, un impulso descansa sobre el fuego que es encontrado engendrando su propia carne intelectual, el brillo del destino dice que es virgen, una anciana exhibe al poeta con un monitor de ideas metido en su gesto reflexivo, las razas materiales del logro evolutivo se amontonan en torno a una sonrisa empapada de lluvias mojadas de silencio, los mortales se fusionan a su naturaleza auto actuante entrando así en el compromiso que vincula la ascensión de sus enlaces a mundos asignados para la experiencia eterna, un circulo se duele en el movimiento de sentimientos embutidos en un tiempo que se arruga, el sueño es una caja llena de abismos transparentes, mi voluntad se agrieta contra la presión de tu nervio, un extrahumano desaparece y es sólo tacto, un golpe entra en un cuarto cálido donde la luz se hace espuma cobijando todos nuestros orgasmos, escarban su cráneo para romper el aliento de la pena establecida en lo más alto de su dolor, el querer busca al amor en las células de un espíritu que lo recorre, que lo besa en el valle nevado de sus decisiones, la muerte natural residía en la personalidad de un tipo con tres cerebros, sobre el vientre se humedece el plan de una boca que roza tu ombligo como un relámpago sumergido, la luna abre mi adiós de plata en sus venas de pensar marino.